Nada

Era un pobre diablo que siempre venía
cerca de un gran pueblo donde yo vivía;
joven, rubio y flaco, sucio y mal vestido,
siempre cabizbajo... ¡Tal vez un perdido!

Un día de invierno lo encontramos muerto
dentro de un arroyo próximo a mi huerto,
varios cazadores que con sus lebreles
cantando marchaban... Entre sus papeles
no encontraron nada... los jueces de turno
hicieron preguntas al guardián nocturno:
este no sabía nada del extinto;
ni el vecino Pérez, ni el vecino Pinto.

Una chica dijo que sería un loco
o algún vagabundo que comía poco,
y un chusco que oía las conversaciones
se tentó de risa... ¡Vayas unos simplones!

Una paletada le echó el panteonero;
luego lío un cigarro; se caló el sombrero
y emprendió la vuelta... Tras la paletada
nadie dijo nada, nadie dijo nada..

Carlos Pezoa Veliz






Allanomiento

En el registro se encontraron
las siguientes armas:

una sintaxis española,
una semántica con la cual
se preparaba la pólvora,
una fonética de origen anarquista
y unos cuantos poemas
de pésimo gusto, según
mi comandante.

D. L.